Los habitantes de la urbanización Los Sauces han alzado nuevamente su voz para exigir una solución a la falta de agua potable, un problema que los afecta desde hace más de 15 años. A pesar de haber cumplido con el pago regular de sus recibos, cientos de familias, especialmente en la zona alta del sector, siguen sin acceso constante al recurso más vital.
Los dirigentes de la urbanización se reunieron con el alcalde de La Banda de Shilcayo para exponer nuevamente su problemática y evaluar el lugar donde se construiría un reservorio que podría solucionar la crisis hídrica. Sin embargo, la población se mantiene en alerta, pues temen que este proyecto quede sólo en promesas, como ha ocurrido en el pasado.
Juan Alberto Rojas Sánchez, presidente de la urbanización, recordó que cuando las familias se establecieron en la zona, confiaban en que contarían con servicios básicos adecuados, sin embargo, la realidad ha sido diferente. «Sólo los vecinos de la parte bajan tienen agua, mientras que en la parte alta padecemos diariamente. La única solución que nos han brindado es el reparto ocasional de agua en cisternas, pero esto no es suficiente«, señaló Rojas Sánchez.
A pesar de la falta de agua en sus viviendas, los pobladores siguen recibiendo sus facturas mensuales sin interrupción, lo que ha generado malestar y desconfianza en la administración del servicio. «Pagamos por un recurso que muchas veces no llega. No queremos seguir esperando, necesitamos una solución definitiva«, agregó el dirigente.
La comunidad espera que el municipio cumpla con su compromiso de ejecutar el proyecto de inversión en optimización, ampliación marginal, reposición y rehabilitación (IOARR), el cual beneficiaría a más de 800 familias con un sistema de abastecimiento eficiente y sostenible.