Por este deteriorado puente, ingresan los alumnos de la I.E. N° 1291, ubicada en la asociación de vivienda Óvalo del Sur, en el distrito de la Banda de Shilcayo. La situación del plantel es deplorable, desde el ingreso hasta la misma infraestructura donde los niños reciben las clases.
Luego de la protesta desarrollada este jueves en el frontis de la municipalidad bandina, nuestro equipo de prensa visitó sus instalaciones para conocer de primera mano, la crítica situación que viven. La cocina del programa Qali Warma y varias aulas prefabricadas están al borde del colapso, con nulas posibilidades de reubicarse a otra parte del plantel porque no hay donde.
El director de la institución, Roldan Gonzales Campos, señaló que las autoridades se comprometieron en brindar solución del problema. «Es imperativo contar con ambientes adecuados y más amplios que ofrezcan condiciones seguras para nuestros estudiantes. Las aulas actuales, muchas de ellas prefabricadas, se encuentran en un estado lamentable, con techos y paredes agrietadas, mientras que otras zonas del colegio, como la cocina de Qali Warma, están a punto de colapsar«, refirió.
La autoridad educativa, dijo que de no encontrar respuesta rápida, la Municipalidad de la Banda de Shilcayo tendrá que asumir la cuota de responsabilidad. No tienen a dónde ir, por lo que el peligro cada día se acrecienta.
Por su parte, la profesora Celia Guevara, encargada de los niveles inicial y primaria, mostró las condiciones precarias de los salones. Señaló que el riesgo de colapso aumenta durante la temporada de lluvia cuando la quebrada que pasa cerca de la institución, incrementa su caudal y arrastra árboles, generando deslizamientos y olores fétidos.
Los niños y niñas que asisten a la institución están expuestos a múltiples riesgos, no sólo por la infraestructura deficiente, sino también por la falta de espacios recreativos adecuados. La escuela no cuenta con una losa deportiva, lo que obliga a los alumnos a jugar en la calle, exponiéndose a ser atropellados por vehículos. «Es inaceptable que nuestros hijos tengan que jugar en la vía pública porque no hay un lugar seguro en el colegio«, denunció uno de los padres.
Además de los problemas estructurales, los techos y cielorrasos de varias aulas presentan grietas, lo que supone un peligro inminente para la integridad física de los estudiantes. Ante esta situación, los padres de familia y el personal docente exigen que las autoridades municipales y el Goresam tomen medidas urgentes para atender la emergencia del plantel.
La comunidad educativa de la I.E N° 1291 solicita una respuesta inmediata para evitar que el colapso de la infraestructura ponga en riesgo la vida de los alumnos y garantice un entorno adecuado para su formación académica.