Se suma a la Administración de Drogas y Alimentos de EE.UU. y a otras entidades en el rechazo a la utilización del popular antiparasitario, salvo en ensayos clínicos
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) desaconsejó la utilización del antiparasitario ivermectina en la prevención o el tratamiento del COVID-19 por fuera de ensayos clínicos controlados.
La EMA “concluyó que los datos disponibles no apoyan su uso para el COVID-19 por fuera de ensayos clínicos”, informó la agencia con sede en Amsterdam en un comunicado. Otros estudios “son necesarios para sacar conclusiones sobre la eficacia y la inocuidad del producto en la prevención y el tratamiento del COVID-19”, agregó.
La eficacia de la ivermectina contra el coronavirus, a veces presentada en las redes sociales como remedio “milagro”, no está demostrada científicamente. El empleo de esa medicina como tratamiento contra el COVID-19 no es autorizado en la Unión Europea, y la EMA no recibió “ninguna petición para tal utilización”, precisó el regulador europeo.
De este modo, la EMA se suma a la Administración de Drogas y Alimentos de EE.UU., a la Organización Panamericana de la Saludos y a otras entidades del mundo en el rechazo a la utilización del popular antiparasitario, salvo en ensayos clínicos que busquen comprobar su eficacia y seguridad para el tratamiento del COVID-19.
A inicios de marzo, la revista Journal of the American Medical Association (JAMA) publicó uno de los ensayos clínicos sobre ivermectina más completos realizados hasta el momento. Su principal conclusión fue que no disminuyó significativamente la duración de los síntomas en adultos con COVID-19 leve.
La última revisión de la evidencia científica sobre tratamientos para el COVID-19 realizada por la OPS, que analiza 85 intervenciones terapéuticas hasta marzo de 2021, concluye que, tras revisar más de 20 ensayos clínicos sobre ivermectina, hay “una certeza muy baja en la evidencia [que respalde su uso]”,pues los estudios que muestran ciertos beneficios tienen alto riesgo de sesgo, por lo que “se necesita más investigación para confirmar o descartar esos hallazgos”.
Fuente: Diario El Comercio
Otros estudios “son necesarios para sacar conclusiones sobre la eficacia y la inocuidad del producto en la prevención y el tratamiento del COVID-19”, agregó la EMA.