En una sorpresiva operación realizada este viernes por la tarde, agentes de la Policía Nacional del Perú recuperaron tres motocicletas robadas, una de ellas con la placa adulterada, que se encontraban ocultas en una vivienda del Pasaje Santa Elisa, en el distrito de Morales. Una persona fue detenida.
El operativo también dejó al descubierto un inquietante hallazgo: una considerable cantidad de chalecos policiales, presumiblemente usados por los delincuentes para movilizarse sin levantar sospechas. Además, en el interior del inmueble se encontraron numerosos espejos de motos lineales, lo que sugiere una red organizada de desmantelamiento y venta de autopartes robadas.
Una de las motocicletas fue reportada como robada en el distrito de La Banda de Shilcayo, mientras que otra desapareció en inmediaciones de una conocida universidad local. La placa de una de las unidades había sido modificada, confirmando la sospecha de que los vehículos eran preparados para su reventa o reutilización criminal.
La dueña del inmueble, Johana Gómez, afirmó ante las autoridades que alquiló la casa hace ocho meses a unos inquilinos que dejaron de pagar la renta, por lo que ya había iniciado un proceso para desalojarlos. «Nunca imaginé que estuvieran usando mi casa para esto«, declaró visiblemente consternada. Según fuentes policiales, ya se ha identificado un segundo lugar donde los delincuentes estarían almacenando más motocicletas robadas, lo que abre la puerta a una investigación más profunda sobre esta red delictiva que habría estado operando bajo la fachada de legalidad.
